Fiestas de Casamiento
Otra calurosa noche de humedad, calor y el cantar de las chicharras. 6 AM me voy a la cocina a ver qué hay para comer y se escucha la puerta, alguien entró, ¿a esta hora? Pasos, puteadas, ése es Gabriel, el vecino de atrás, esas puteadas son inconfundibles. Se ve que vio luz y me golpea, así que le abro. Cansado, muy cansado, traje medio pelo y bolsito donde guarda su cámara de video, esa cámara que cuando se la compró me dijo que con ella iba a llegar a Hollywood. -¿Pero no era que nunca más ibas a hacer casamientos? -Never say never. ¡Never! Que querés que te diga... Hacete unos tererés, ¿querés? ¿Cuándo se van a callar las chicharras? Hijas de puta. 20 años que no hacía sociales, ¡veinte!, ¿y sabés qué cambió? Nada cambió, ¡nada! Es increíble pero no se entiende, pasan los años, pasan las modas, la historia, las cosas, todo, ¡menos las bodas! ¡Cómo las odio! Te juro que es para contratar a un musulmán de éstos y poner una bomba y que vuelen todos. Primero te